Listillos

El pasado 18 de octubre, el presidente del COMB, Dr. Bruguera, que hasta ahora estaba a verlas venir, se decidió a escribir al letrado para decir lo que se espera de él: nada. A la derecha podéis ver la contestación del ínclito José María el 22 de octubre (Doble click para verlo en grande- sin foto-)
Como puede verse, los argumentos para cambiar horarios en las ABS son de peso:

1) Ya lo hacen en otros sitios.
¿ No habíamos quedado que hay que diversificar para adaptarse a las circunstancias ? Ha sido la canción del verano del ICS con CiU durante décadas y con PSC desde que gobiernan. Con este argumento hicieron el ICS más pequeño a costa de experimentos privados, con el apoyo del COMB, y el resultado está a la vista por más que usen el pesebre para medrar.

2)Voluntad de homogeneizar horarios:
Si en cada centro y cada facultativo, puede negociar con el director su preferencia horaria, por donde se homogeneiza (suena mal y todo!) . Entonces, ¿que es lo que quiere decir?. Está claro : por mis puñetas que lo hago....o sea para joder. ¿Qué ventaja hay con ello para la población, para el profesional y para la administración? : acabarán encrespando a todo el mundo y puede que aparezcan socavones (en mi ABS ya hay baldosas que se mueven hace varios años).

3)La opinión de expertos y la realidad sociolaboral y cultural de la población:
Parece que no es suficiente con 11 horas de servicio en las ABS y que con 1 hora más sí lo es. Si se trata de conciliar vida laboral y familiar: hay que acostumbrar al ciudadano a una vida más sana, ó sea hay que irse antes a la cama, beber y fumar menos, ver menos TV... Si continuamos dando servicio toda la noche (como el metro) seríamos más accesibles, y hasta las madres podrían trae los niños a revisión de 2 a 3 de la mañana !! (¡Guau, si es de primero de Esade!).
Eso sí nuestra conciliación no importa, tampoco importa que se cierren puntos de atención continuada y el ciudadano tenga que ir más lejos (puede ser les quede el Hospital más cerca), y tampoco importa que sigamos atendiendo más población de la que podemos, ni que les dediquemos poco tiempo, ni que no podamos seguir un plan de formación o de investigación mínimos. Se trata de seguir en la misma línea de siempre: no aprenden ni les interesa aprender de los errores, quizás porque su horizonte es de 4 años, y eso en política sanitaria no es nada. Hay que vender el producto y lo harán aunque tengan que engañar a todo el mundo. También se trata de que las empresas obtengan más rendimiento y los trabajadores no pierdan tiempo en ir al médico: aquí coinciden con el Dr Bruguera y con el obispo de Logroño.

¿Cómo no va a haber resistencias ?, si no es por la innovación, sino por un nuevo paso a atrás en la contrareforma de la atención primaria.